Necesitábamos hacer un reset, recapacitar y continuar adelante... y que mejor manera que en un sitio emblemático como un restaurante japonés. Allí nos reunimos de manera informal, para cenar con vistas al futuro más inmediato y los proyectos que siguen preparándose con más fuerza que nunca, y al futuro lejano, o no tan lejano, que nos marcará que podamos volver a reunirnos en una mesa de un restaurante japonés, pero esta vez en la ciudad nipona de Omiya.
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