Hace tres años que este sensacional ejemplar de Acer palmatum arakawa convive conmigo. En estos tres años su desarrollo ha sido sensacional y su adaptación a ishitsuki mejor de lo que me podía imaginar. Soju de origen convive en su doble forma recreando una sensación global a mi entender armoniosa. Su anterior dueño me sugirió de separar los dos troncos, pero una vez examinados con detalles creí que el conjunto era inseparable. Unos años más de formación y acabará de engrandar la copa y de definir su sensacional porte.
Adquisición en 2015
Primer trabajo y defoliado 2016
2018
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