Sólo me inicie, nadie compartió conmigo la necesidad de saber, pero en todo momento supe, se y sabré quién y quienes fueron los que me llevaron a conocer aquello que tanto bien me hizo, me hace y me hará...
En la tolerancia y la comprensión del todo esta la verdadera enseñanza, incluso ante aquello que a simple vista parece desbordar los sentidos del saber...
La objetividad es un hilo muy muy fino del que puedes caer y posiblemente hayas caído, en definitiva será el tiempo, quién ponga a cada cosa en su lugar. En este mundo y en este arte, el del Bonsái, la disciplina debería ser el sello de nuestra aptitud. La comprensión de la verdad debería llevarnos más allá y ser la redención de nuestros actos y nuestros pecados para con la propia naturaleza, y más cuando no sabíamos nada y del poco saber ahora nos creemos dioses.
En verdad, en verdad te digo que ahora pesan las palabras, pesan los sentimientos y lo peor es que pesan los hechos, por ello la decepción es infinita, y más cuando ésta, viene servida de la mano de un víbora capaz de seducirte sin darte cuenta, sin observar lo que dejas en el camino.
Simplemente Adiós!!! como dijo el Dalai Lama: La amistad sólo podía tener lugar a través del desarrollo, del respeto mutuo y dentro de un espíritu de sinceridad.
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